Volver


Rudolf Steiner

EL ZODIACO Y LAS REGIONES DE LAS DOCE CONCEPCIONES DEL MUNDO

Con respecto a lo espacial-material, Rudolf Steiner ha valorado la relación del zodiaco con referencia a las partes del cuerpo – tal como Agrippa von Nettesheim apunta a partir de antiguas tradiciones – a modo de una concepción fructífera. Se trata sin embargo de un aspecto unilateral, que Rudolf Steiner mismo varía reiteradas veces.

Aries

-ojo, frente, cabeza

sentido del yo

Tauro

-laringe

Sentido del pensar

Géminis

-hombros

Sentido de la palabra

Cáncer

-Costillas, pecho

Sentido de la audición

Leo

-corazón

Sentido del calor

Virgo

-fosa estomacal

 Sentido de la visión

Libra

-caderas

Sentido del gusto

Escorpio

-fuerzas sexuales

 Sentido del olfato

Sagitario

-Muslo superior

Sentido del equilibrio

Capricornio

-Rodilla

Sentido del movimiento propio

Acuario

-muslo inferior

Sentido de la vida

Piscis

-pies

Sentido del tacto


Rudolf Steiner: El pensamiento humano y el cósmico
                           3° conferencia, del 22.1.1914 en Berlín

Las relaciones que existen entre las diferentes imágenes zodiacas con respecto a lo externo material-espacial, de hecho están presentes en el ámbito del espíritu, entre estas concepciones del mundo y las relaciones que establecen los planetas por nosotros mencionados durante su girar a lo largo del zodiaco, se corresponden con las circunstancias de la concepción del mundo, pero de modo tal que a la gnosis lo percibimos como Saturno, el logismo como Júpiter, el voluntarismo como Marte, el empirismo como Sol, la mística como Venus, el trascendentalismo como Mercurio, y el ocultismo como Luna.

Hasta en las imágenes exteriores -  esto empero no es lo principal,  lo principal de hecho es, que las relaciones más profundas, se corresponden con esta paralelización – pero, hasta en las imágenes exteriores, donde algo así debe ser constatado, podemos hallar algo similar. La luna queda oculta, cuando es luna-nueva; tiene que recibir la luz del sol, del mismo modo como las cosas ocultas siguen siendo ocultas, hasta que se eleva la capacidad anímica, a través de la meditación, la concentración, etc., iluminando las cosas ocultas. El ser humano que pasa por el mundo, confiando tan solo en el sol, que solo asimila aquello que el sol ilumina, es empirista. Quién aún reflexiona un poco acerca de aquello que el sol ilumina, y aun conserva los pensamientos cuando el sol ha descendido, ya no es empirista, porque no tiene ese vínculo de dependencia con el sol. “Sol” es el símbolo del imperimismo. Podría entrar en mayores detalles con respecto a estas cosas; pero disponemos tan solo de cuatro horas, para este tema tan importante y quedará a vuestro cargo, recabar relaciones más exactas, mediante vuestros pensamientos o vuestra investigación. Lo cual no es tan difícil, una vez que hallamos al esquema.

Sucede con demasiada frecuencia en el mundo, que las personas no se encuentran en la búsqueda de la universalidad. De hecho, tendríamos que poder representar en el alma, los doce matices de la concepción del mundo, y en nuestro interior, tendríamos que haber vivenciado algo, referido a: ¿qué vivenciamos siendo gnósticos? ¿Qué vivenciamos como lógico, como voluntarista, como empirista, como místico, como transcendentalista? ¿y qué vivenciamos como ocultista?”. En definitiva, todo aquel que quiere penetrar de hecho a los misterios del mundo en el sentido de la investigación espiritual, tiene que pasar por esto. Y aunque, aquello que está indicado en “¿Cómo obtenemos conocimientos de los mundos superiores?” no está definido con exactitud a estos argumentos, todo lo contenido, desde otros puntos de vista nos puede conducir a los diferentes estados anímicos, que aquí se señalan con el estado anímico gnóstico, con el estado anímico de Júpiter, etc.

En el mundo sucede a menudo que el hombre es tan subjetivo, que se expone a una sola constelación, o a un solo estado anímico. Justamente, grandes personajes en el campo de las concepciones del mundo, con frecuencia tienen esa unilateralidad. Así por ejemplo, Hamerling es un expreso monadisto voluntarista o monadológico voluntarista, Schopenhauer es un expreso psíquicovoluntarista. Con frecuencia los grandes hombres tienen dispuesta su alma de manera tal que su estado anímico de la concepción del mundo planetario, se encuentra en una determinada constelación espiritual. Las demás personas, con mayor facilidad se manejan con los diversos criterios. Pero también puede suceder, que desde diferentes lados son incentivados con referencia a su concepción del mundo, aquello que imponen a modo de concepción del mundo.

Puede suceder por ejemplo, que alguien es un destacado logista, que empero su estado anímico logístico se encuentre en la constelación del sensualismo, a su vez puede ser un buen empírico, pero su estado anímico empirista, se encuentra en la constelación del matematismo. Esto puede suceder. Al ser así, se impone una muy definida imagen de la concepción del mundo. En la actualidad justamente tenemos esa imagen de la concepción del mundo, que se ha producido por el hecho de que alguien a su sol – visto espiritualmente – lo tiene en géminis y su Júpiter en Leo; y se trata de Wundt. Y comprenderemos todo aquello que aparece en la literatura filosófica de Wundt cuando se nos revela el misterio de su especial configuración del alma.

2.11.2017